MARCELINO VAZQUEZ 04/05/2003
La irrupción de animales en la calzada de la recién inaugurada autovía AS-1 (Gijón-Mieres), conocida popularmente como la autovía minera, puede provocar graves problemas de seguridad para los conductores y de hecho es ya una de las principales causas de la siniestralidad que registra esta vía. Así lo denunció la Unión Profesional de Guardias Civiles (UPGC). Precisamente, ayer tuvo lugar uno de los últimos incidentes por este motivo. Un total de 20 vacas llegaron hasta la misma autovía pasadas las 8.15 horas en las inmediaciones de la glorieta de Ferreras, salida 19. La rápida intervención de varias dotaciones de la Guardia Civil de Tráfico, que contaron posteriormente con la ayuda de la policía local de Siero, evitó que se produjese algún accidentes de tráfico al lograr "reagrupar al grupo de cabezas de ganado y sacarlas de la calzada". No obstante, el incidente tardó unas dos horas en resolverse, al ser el tiempo en que los guardias civiles de tráfico y agentes de la policía local de Siero permanecieron custodiando, fuera de las calzadas de la vía de comunicación, las veinte vacas. Al final, y tras resultar infructuosas todas las gestiones realizas con el propósito de identificar al propietario de las reses o en su defecto que se hiciera cargo de ellas alguna administración pública, las fuerzas del orden optaron por dejar "al grupo de vacas en un camino rural", pasadas las 10 horas.
LOS ACCESOS
La entrada de animales a la autovía minera es constante. Este tipo de hechos se ha producido en más de cuatro ocasiones a lo largo de los 33 kilómetros, que separan Mieres de Gijón, de acuerdo con los atestados que vienen realizando los agentes de la Guardia Civil de Tráfico. Las reses penetran a la vía a través de los accesos a la nueva vía rápida de comunicación. La facilidad para penetrar en la calzada se debe, según algunas fuentes, a "la mala configuración de los accesos". Entre otras condiciones de seguridad, los entronques o glorietas no tienen los preceptivos cierres perimetrales. La otra causa de la irrupción de reses en la doble calzada de la autovía minera es "la mala instalación de la valla cinegética", según hizo ayer público la UPGC.
En otras cuestiones se denuncia que hay zonas de especial peligro donde no se instaló esa red, lo que determina que cualquier animal suelto pueda acceder con relativa facilidad a la vía de comunicación.
Asimismo, se alerta que hay determinados tramos donde los cierre no ofrece las adecuadas condiciones de seguridad. Ese hecho, según exponen los propios usuarios de la autovía minera, hace que los animales puedan tirar, sin apenas dificultad, la valla y entrar en la calzada. La irrupción de animales en la autovía minera, según la denuncia de la UPGC, "es una de las principales causas de los accidentes registrados hasta la fecha".
Afortunadamente, ese aumento de la siniestrabilidad en la nueva vía rápida, que está en servicio desde el pasado 29 de marzo y en los primeros días no tuvo un elevado índice de circulación, no llegó a ocasionar víctimas mortales. Hasta el momento, los accidentes se saldaron en su práctica totalidad con daños materiales en los vehículos que han llegado a atropellar desde un jabalí hasta un perro. El atropello de una vaca ocasionó el destrozo total de uno de los coches implicados en este tipo de accidentes.
El mismo problema en otra vía vecina, la A-66, a la altura de Lena
04/05/2003
En el término municipal de Lena la entrada de ganado en la autovía A-66, fundamentalmente vacuno, provocó varios accidentes. En reiteradas ocasiones los siniestros, algunas veces graves para los ocupantes del vehículo, ocurrieron por la noche. De forma reiterada, desde el ayuntamiento se viene alertando de los graves peligros que provocan las reses cuando acceden a la autovía. Las medidas adoptadas por la administración local, así como las revisiones de cierres de la A-66 que se realizaron, lograron reducir sensiblemente el número de accidentes a consecuencia de la irrupción de animales en la calzada de la autovía en todo el tramo que atraviesa el concejo lenense.
PETICION DE LOS PROFESIONALES
Los agentes piden soluciones para atajar este problema
Í· Invitan a Tráfico y al Principado a reforzar la seguridad de la vía
M.VAZQUEZ 04/05/2003
La Unión Profesional de Guardias Civiles, que ayer denunció públicamente el aumento de la siniestrabilidad en la autovía minera por la irrupción en la calzada de animales sueltos, señala directamente a la Consejería de Infraestructuras, los ayuntamientos y la Jefatura Provincial de Tráfico, como "las administraciones con competencia que deben adoptar medidas para solventar el problema", que comienza a ser motivo de preocupación para los agentes de tráfico. El conjunto de estos organismos, según se pone de manifiesto en el comunicado público, "están en condiciones de aplicar soluciones para evitar o al menos paliar los accidentes que se vienen produciendo por la presencia de animales sueltos en la nueva vía rápida de comunicación entre Mieres y Gijón". Para que se proceda a establecer nuevas actuaciones que impidan el acceso del ganado a la autovía minera, la UPGC sostiene que se hace imprescindible que las administraciones con competencia "muestren un verdadero interés en hacer frente a la situación que está ocasionando un incremento en la siniestrabilidad en la nueva vía de comunicación", que cada vez registra una mayor densidad de circulación. De acuerdo con la información facilitada por la Guardia Civil, tanto la Administración central como la regional "tienen perfecto conocimiento de los accidentes que se producen por la entrada de animales en la calzada y también de las deficiencias que hay en los accesos a la autovía minera y en la red cinegética", que delimitan la autovía minera. Por el momento, desde el Principado no se ha aplicado ninguna medida correctora. Las soluciones para evitar que los animales sueltos irrumpan en la calzada ya se apuntan en los atestados que realiza la Guardia Civil de Tráfico cada vez que se produce un siniestro. También, se suele hacer constar el posible lugar por el que el animal accedió a la autovía minera con el fin de que se puedan adoptar medidas para atajar el problema.