La operación policial, que ha sido dirigida desde Madrid por el fiscal de Sala de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, y que ha contado con el apoyo de una brigada especial de policías desplazados expresamente a la isla, continúa abierta, ya que los investigadores buscan al cabecilla del grupo, que se encuentra en ignorado paradero.
Los arrestados, con edades comprendidas entre los 18 y 25 años, fueron trasladados ayer por la tarde a los juzgados de Vía Alemania, donde prestaron declaración ante el magistrado del juzgado de instrucción número 8 de Palma, en funciones de guardia. Los jóvenes pasaron todo del fin de semana en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía, en Palma. En un principio, se les imputa un delito contra la seguridad del tráfico por presuntamente conducir de forma temeraria.
Todos ellos son mayores de edad y carecen de antecedentes penales. La mayoría dispone de un vehículo de su propiedad. Se trata de coches deportivos comprados hace pocos meses y que algunos todavía están pagando. Son turismos de marcas como Audi o Renault Megane.
Los sospechosos, que prestaron declaración en la Comisaría de Palma el pasado sábado y el domingo, admitieron que habían participado en algunas ocasiones en estas carreras. Varios de los jóvenes confirmaron que las pruebas de velocidad o "picas" tenían lugar los viernes por la noche, sobre las diez y media o las once, en una recta cercana a la prisión de Palma. Estos arrestados reconocieron que hacían "piques" con sus coches y que otras veces sólo acudían a la zona para presenciar las carreras. También destacaron que las competiciones siempre se realizaban en una recta con mucha visibilidad para ver si se acercaba alguien y no poner en peligro a otros conductores. Estas prácticas habrían tenido lugar desde hace varios meses, según la versión de los sospechosos. Precisamente, años atrás, la Policía ya había actuado en Vía Asima, en el polígono de Son Castelló, para poner freno a las carreras ilegales que se disputaban en plena calle los fines de semana.
En esta ocasión, los agentes mostraron a los sospechosos varios vídeos que están colgados en Internet donde se observan varias maniobras temerarias como derrapes y "trompos" en aparcamientos y calles de Palma. En estas grabaciones también aparece un hombre muy popular en este ámbito, conocido como ÁMatías el humildeÁ, que sería el presunto cabecilla. Fue a partir de estos vídeos en la Red cuando la Brigada de Delitos Tecnológicos empezó la investigación. Los conductores detenidos el viernes negaron tajantemente realizar apuestas durante las carreras. Según su versión, no tienen dinero para apostar y, si lo hicieran, siempre perderían porque ÁMatíasÁ es el que tiene los mejores coches y, por tanto, sólo ganaría él.