¿Qué denuncian las víctimas?
En prácticamente todos los casos, cuando el causante del accidente es un japonés, denuncian que la policía no pone verdadero interés en averiguar cómo fueron los hechos y se limita a tomar los datos mínimos indispensables de la víctima extranjera.
Suponemos que el poco dominio del idioma japonés sea un factor de peso para esta actitud policial, pero no debe ser, de ninguna manera, una justificación. La policía tiene el deber de investigar todos los detalles para dejar sentado el accidente en el acta policial.
Este documento es especialmente importante porque en él se especifica el grado de responsabilidad del causante del accidente. Y según sea el grado o porcentaje de responsabilidad, la suma que podrá cobrar la víctima como indemnización y reintegro del salario por los días no trabajados a causa del accidente, será mayor o menor.
Otro punto esencial es la atención médica que recibe el accidentado. Por lo general, los gastos médicos son cubiertos por el seguro obligatorio que tiene toda persona en Japón que maneje un vehículo.
Pero en muchos casos hay una secuela, es decir, la víctima no queda bien del todo y tiene que seguir un tratamiento ambulatorio. Aquí otra vez el dominio del japonés es esencial para explicar al médico lo que le sucede y convencerlo de que necesita seguir tratándose. Si no sabe explicarse, lo más probable es que el médico le diga que ya está bien.
Pero la víctima sabe que no es así, que le han quedado secuelas del accidente?. Si continúa tratándose tendrá que pagar de su bolsillo porque el reporte médico asegura que el paciente está totalmente curado.
Pues bien, esta es nuestra realidad en Japón, una realidad que conocemos por experiencia ajena o porque la hemos vivido en carne propia. Las autoridades policiales no colaboran con los extranjeros y los médicos tampoco hacen mayores esfuerzos por entender nuestra situación.
¿Qué es lo que tenemos que hacer?
El japonés Osamu Takahashi, que vive en Kanagawa y brinda asesoría a los extranjeros en los casos de accidentes, recomienda a la víctima acudir a una oficina de consultoría para extranjeros y buscar allí la ayuda de un experto en la materia que sea capaz de defender los derechos del accidentado ante la policía.
El experto también debe acompañar al extranjero cuando se presente ante el médico porque sabrá explicar su situación y la necesidad de que cobre un reintegro por secuelas del accidente.
Si por desgracia usted o algún familiar o conocido sufre un accidente de tránsito, no se confíe, no deje todo en manos de las autoridades policiales porque ellos no tienen la costumbre de preocuparse por los extranjeros.
Asesórese bien para cobrar las sumas por reintegro, indemnización y otros, que por derecho le corresponden.?