EL SINIESTRO
Salida de vía: el vehículo Renault 19 Chamade en el que viajaban los cinco jóvenes perdió el control a su paso por la autopista A-37, que une Crevillent y Cartagena, junto a la salida de Dolores y Almoradí. Faltaban unos minutos para las diez de la mañana.
Muerte: tres de los ocupantes del turismo fallecen en el acto. Un cuarto es trasladado en helicóptero al Hospital General de Alicante en estado muy grave pero fallece mientras los facultativos intentaban salvarle la vida.
Herido: sólo hay un superviviente del trágico accidente. Un joven de 24 años, del que se desconoce la identidad, que resultó herido leve y fue trasladado al Hospital Comarcal de la Vega Baja.
Perdieron el control del vehículo en el que viajaban, un golpe seco contra el frío hormigón y murieron. Tres jóvenes ilicitanos de edades comprendidas entre los 19 y los 27 años y, al parecer, un menor de edad, fallecieron ayer, poco antes de las diez de la mañana, en la autopista A-37 que une Crevillent con Cartagena. El siniestro se produjo junto a la salida de Dolores y Almoradí, en término municipal de la segunda localidad.
Según informaron fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, el accidente se produjo, tal como apuntan las primeras investigaciones, por la salida de la vía del turismo Renault 19 Chamade de color rojo que ocupaban los cinco jóvenes y que viajaba a gran velocidad por la citada vía. Sólo uno de ellos, de 24 años, del que no se ha podido conocer la identidad, pudo salvar la vida y fue trasladado por una ambulancia del Servicio de Atención Médica Urgente (Samu) al Hospital Comarcal de la Vega Baja, donde quedó ingresado. Las fuentes consultadas no supieron precisar si este último ocupante del coche era también de Elche.
Dos de las víctimas del trágico accidente murieron en el acto mientras que otro se debatió entre la vida y la muerte en el mismo lugar durante unos minutos y murió cuando ya estaban allí los facultativos del servicio de emergencias. Uno de ellos contaba tan sólo 21 años, identificado como Antonio José G. A., otro, de 23, que responde a las iniciales de íngel L.G., y el tercero, de 27, Juan P. M., que cuenta con un amplio historial delictivo. Un cuarto, al parecer menor de edad, según explicaron fuentes cercanas a la investigación, fue trasladado en estado de extrema gravedad al Hospital General de Alicante, aunque fuentes de la Guardia Civil explicaban que falleció antes de que aterrizara el helicóptero de la Diputación que le transportaba al centro sanitario. Tardaron varias horas en identificarlo.
El siniestro obligó a los efectivos de la Guardia Civil a cortar uno de los carriles de la A-37 en dirección Alicante, lo que hizo que las retenciones fueran kilométricas en la autopista mientras se levantaron los cuerpos y se retiró el coche accidentado. Los cadáveres de los tres fallecidos en el lugar de los hechos fueron trasladados al tanatorio de la Vega Baja, donde quedaron pendientes de que les realizaran la autopsia. El cuarto, al parecer, se quedó en el depósito forense de Alicante.
Según fuentes cercanas al caso, ninguno de los ocupantes del coche siniestrado era familia y las primeras investigaciones apuntan a que se trataba de un grupo de amigos. El vehículo a bordo del que viajaban los cinco implicados en los hechos era propiedad de uno de los fallecidos, íngel L.G., de 23 años.
G. MARTíN / P. M. MACIí/ELCHE / ALICANTE, para Diario La Verdad de Alicante. 18.08.2003